Valencia, 27 de noviembre de 2024
Noelia Barros da Cuña ha publicado el libro Una sinfonía para el Alzheimer en el que analiza la Sinfonía número 3, ‘Epidemia silenciosa’ de Andrés Valero-Castells. El trabajo, editado por Piles Editorial de Música, es un estudio analítico-estético sobre esta obra del compositor valenciano para entender “de una manera más exhaustiva, a través de su música, el proceso que atraviesan los familiares de los pacientes de Alzheimer”, una enfermedad neurodegenerativa que ya se ha diagnosticado a más de 1,2 millones de personas y que afecta a más de 5 millones (enfermos y familiares cuidadores) en España, según la Confederación Española de Alzheimer (CEAFA).
La profesora de música gallega, que prepara una tesis doctoral sobre las obras del músico, indica que el alzhéimer “provoca una degeneración en las células cerebrales (neuronas) progresivamente, arranca con la pérdida de memoria y desorientación espacial y complicaciones para llevar a cabo actividades de la vida cotidiana, y pérdida de memoria, cambios bruscos en la personalidad, pérdida del lenguaje, depresión, rigidez muscular e incluso algún episodio de agresividad”.
La hipótesis del estudio es que la Epidemia silenciosa de Valero-Castells “plasma de alguna manera algunas de las características de la enfermedad en la obra musical”. El objetivo principal de la autora es que “la sociedad comprenda que los recuerdos musicales y la música es tan importante que persistirán en nuestra memoria hasta casi el final de nuestras vidas”.
Barros, que destaca “la gran importancia de este compositor en el siglo XXI” con quien escribió La intertextualidad entre la música clásica y el rock duro, publicada por Piles en 2021, expone en el libro que “la limitada información sobre las causas y la inexistencia de fármacos que curen o paren la enfermedad, ha facilitado que broten los tratamientos no farmacológicos como la terapia musical, como complemento para la medicación”; y demuestra que a través de esta obra, “el músico se maneja con diferentes técnicas estéticas de los siglos XIX, XX y XXI que le hacen transitar entre la modernidad y la tradición”.
La escritora pretende que el trabajo sirva para comenzar “futuras investigaciones, como la exploración de otras obras musicales inspiradas en fenómenos sociales, que ayudan a comprender los fenómenos sonoros”, así como para profundizar en “un análisis de la enfermedad, desde el punto de vista de la musicoterapia”, y también para “plantear unidades didácticas en entornos educativos, a partir de estos recursos, para dar a conocer esta música”.
La obra más importante
Andrés Valero-Castells dedicó la Sinfonía número 3, ‘Epidemia silenciosa’ a su madre que padecía alzhéimer, una obra “muy especial” y la “más importante de su catálogo”, que planteó como “una serie de reflexiones personales, profundas, acerca de mis propios sentimientos y pensamientos, en torno a la vida, la muerte, la eutanasia, el amor materno, la rabia acumulada, la desesperación…” un proceso que “fue muy terapéutico, poder expresar todo eso a través de la composición, y decirle al mundo sin ningún tipo de tapujos ni pudor lo que había en lo más profundo de mi ser” y los conciertos “fueron de un calibre emocional difícil de explicar, de esos que no se olvidan jamás”.
El músico, que agradece la labor de Barros, espera que el libro sirva para “sensibilizar y concienciar a la sociedad sobre un grave problema socio-sanitario de primera magnitud”, apunta a “los beneficios terapéuticos que reporta la música a las personas que padecen esta enfermedad”, y subraya que “es necesario un compromiso social transversal y establecer todo tipo de sinergias para atender las necesidades de todas las personas que padecen o conviven con el alzhéimer”.
“Escalofriante sinfonía”
La Sinfonía número 3, ‘Epidemia silenciosa’, para gran orquesta sinfónica, fue un encargo del Institut Valencià de la Música (IVM), como compositor residente de la Jove Orquestra de la Generalitat Valenciana (JOGV). Se estrenó los días 25 a 28 de julio de 2006, en Llíria, Bocairent, Buñol, y en el Palau de la Música de Valencia. Los directores asistentes de la JOGV, Hilari García, y Juan Carlos Máñez dirigieron los conciertos de Bocairent y Buñol, respectivamente, y el director titular, Manuel Galduf, estrenó la obra en Llíria y en Valencia.
La obra recabó los elogios de la crítica que constató el “éxito rotundo” de una “escalofriante sinfonía” con “un sentido narrativo de impacto tan potente como inmediato”, indicaba que “no hay efectismo ni autocompasión alguna, sólo una impresionante desnudez” en un concierto “extraordinario”, y remarcaba que “no todos los días se escuchan estrenos de este calibre”.
Disco y versión para banda
El concierto final fue grabado por RNE, y el IVM produjo un disco monográfico, dentro de su colección Patrimonio Musical Valenciano Actual. En 2008 la Academia de las Artes y las Ciencias de la Música nominó al compositor como Mejor Autor de Música Clásica, en los Premios de la Música. Posteriormente, la sinfonía fue reestrenada por la Orquesta Filarmónica Martín i Soler bajo la dirección de Carmen Más-Arocas, en el Palau de la Música de Valencia y en el Auditorio de Castellón, el 29 de septiembre y 1 de diciembre de 2018, respectivamente.
Valero-Castells realizó una versión para banda sinfónica por encargo del Centro Instructivo Musical La Armónica de Buñol que, dirigida por el autor, estrenó el tercer movimiento en la localidad valenciana en 2021. El estreno de la obra completa corrió a cargo de la Banda Municipal de Barcelona, dirigida por José Rafael Pascual-Vilaplana en l’Auditori de Barcelona el 12 de febrero de 2023.
La DANA en RNE
Valero-Castells, director y presentador de Pasen y escuchen en Radio Clásica de Radio Nacional de España (RNE), dedicará el programa del próximo 7 de diciembre a los devastadores efectos de la DANA en las sociedades musicales y en el resto del ecosistema musical valenciano. El nuevo espacio, que se emite los sábados de 9h a 10h desde octubre y en el que muestra músicas contemporáneas, clásicas y para banda sinfónica, ha abordado en el mes de noviembre obras inspiradas por medios de locomoción para orquesta y para banda, de Heitor Villa-Lobos, Eric Whitacre, Arthur Honegger, John Adams, Jan Sandström y de Conlon Nancarrow; y fantasías firmadas por Conrado del Campo, Ricard Lamote de Grignon, y Albert Guinovart, sobre temas de Ruperto Chapí, José Serrano y Enrique Granados.
Asimismo, ha realizado una primera aproximación a la intertextualidad entre la música clásica y el rock, con trabajos de los compositores Luis Serrano (para grupo de rock y banda) y de Javier Darias (para ensemble), y versiones de temas del grupo Linkin Park, escritas para banda sinfónica, para cuarteto de cuerda, y para piano; así como a la música de raíz popular que se adentra en el mundo sinfónico y la fusión de canciones populares valencianas con exquisitas orquestaciones con piezas de Pau Chafer.
Cruz de San Andrés en Brasil
La música de Valero-Castells ha estado presente en este mes en Brasil, país en el que el tuba José Martínez, solista de la Orquesta Nacional de España (ONE), incluyó en su programa la obra Cruz de San Andrés del compositor, dentro de la VI Conferencia de la Asociación de Bombardinos y Tubas de Brasil, en la Sala de Conciertos Radegundis Feitosa de la Universidad Federal de Paraíba en Joao Pessoa. El intérprete valenciano ha tocado esta pieza también en Colombia, Argentina, Corea del Sur y EE UU con anterioridad.
Asimismo, el solista de fliscorno Santiago Rosales y el pianista Jorge Molina, interpretaron Romance en el Teatro Kursaal Fernando Arrabal de Melilla, obra que programó también la Banda de Música de la Sociedad Musical La Alianza de Mutxamel, dirigida por José Vicente Algado, en la Casa de Cultura del municipio alicantino. La Banda Sinfónica de la Unión Musical la Aurora de Albatera, bajo la dirección de José María González, interpretó Polifemo en la Casa de Cultura Miguel Hernández. Además, el pianista Miguel Álvarez-Argudo tocó La Tortuga en el programa El café de Mimí, dirigido por Eva Sandoval, en RNE Radio Clásica.
Más de 50 reconocimientos
Andrés Valero-Castells (Silla, Valencia 1973) es catedrático de Composición en el Conservatorio Superior de Música Joaquín Rodrigo de Valencia desde 2004 y ha recibido más de 50 reconocimientos entre los que se encuentran destacados premios en los concursos internacionales de composición de Corciano y Fermo (Italia), Florida (EE UU), Marmande (Francia), Andrés Gaos de A Coruña, Maestro Villa de Madrid, Ciudad de La Laguna (Tenerife), así como otros galardones en Roma y Pavia (Italia), Sevilla, Valladolid, Valencia… entre otras muchas distinciones y nominaciones como director y músico. Parte de su discografía está grabada en países como Noruega, Francia, Suiza, Holanda, Portugal, Polonia, EE UU y Japón.
En su faceta como director ha estado al frente de formaciones como la Orquesta de Valencia, Sinfónica de Galicia, ADDA Simfònica, Orquesta Belles Arts, Mediterranean Strings de Ankara, Banda y Orquesta Primitiva de Llíria, de gran parte de las bandas municipales de España: Madrid, Barcelona, Valencia, Alicante, A Coruña (de la que fue titular), Santiago de Compostela, Vitoria-Gasteiz, Simfo-vents Palma… así como de bandas sinfónicas como la Unión Musical de Llíria, la Artística y la Armónica de Buñol, Lalín, Baeza, Musikene o de la Federación de Sociedades Musicales de la Comunidad Valenciana (FSMCV).
Asimismo, ha dirigido estrenos absolutos y nacionales de relevantes compositores y a ensembles, ópera en concierto y bandas sinfónicas en el Festival Ensems. Es el fundador del ensemble Estudi Obert, y en la actualidad es académico numerario de la Academia de la Música Valenciana.