Pascual-Vilaplana destacó la entrega de los músicos de la Banda compostelana, pero hizo hincapié en la necesidad de aumentar su número. «La formación sigue con mismos problemas de plantilla que hace ocho años. Debería tener una plantilla más estandarizada. Siguen siendo pocos músicos para una banda profesionalizada como es ésta». «Una de las cosas que permanece es el grado de implicación de los músicos. A pesar de las dificultades, su profesionalidad es extraordinaria. Hacen que todo sea muy fácil. Llegué el pasado lunes y hemos hecho cuatro ensayos de un gran nivel. Se les puede exprimir mucho, porque tienen una gran flexibilidad. Es un gran placer trabajar con ellos», destaca el reconocido director. Además, asegura que la situación de la formación compostelana no es un caso único en el país. «Muchísimas bandas españolas están pasando por lo mismo. Tampoco estamos pidiendo tanto, las bandas deberían tener una plantilla como la de las orquestas sinfónicas».
