En esta sección de “Parlem amb…” damos paso a jóvenes músicos que a pesar de los tiempos tan difíciles que hemos atravesado, han seguido abriéndose paso sin escatimar esfuerzos. En este caso hablamos con Celia Torá, una joven con dos carreras musicales. Los jóvenes vienen con fuerza, con buena preparación y arrasando fuerte y este es su caso. Con tan solo 9 años inició su carrera de fagotista. Ha pertenecido a diferentes orquestas sinfónicas (Vigo, Madrid, Nápoles, México…). Su pasión por la dirección le hicieron volver de nuevo al conservatorio para terminar esta carrera. Igualmente fuer gerente de la Compañía de Zarzuela Lírica de Madrid actuando en los mejores teatros de España y México.
Desde esta web pensamos que es necesario incentivar y promover a las generaciones venideras que en cierta forma aumentan el patrimonio y el valor musical que formamos entre todos.
Comencé en el mundo de la música por imitar a mis hermanos mayores
“Mis comienzos en el mundo de la música vinieron de la mano de mis hermanos mayores, ellos estaban ya en la academia de música y como toda hermana pequeña, quería hacer lo que estaban haciendo mis hermanos.
Cuando accedí al conservatorio elemental de música de Murcia, tuve mucha suerte de recibir clase por uno de los mejores profesores de fagot, Vicente Navarro. Mis años de estudiante siempre han ido acompañados de conciertos en diferentes formaciones, certámenes y recitales. “
Terminé mi segunda carrera con la actividad musical paralizada
“Cuando terminé mi segunda carrera, Dirección de Orquesta, la pandemia ya había paralizado la actividad musical, por lo que creé un festival de música de cámara para intentar activar la música clásica en mi pueblo, Abanilla, “Festival en Escalera”. Después tuve la fortuna de poder ser la directora artística de otro en la localidad de Hondón de los Frailes, Alicante, llamado “Conciertos del Fraile”.
Uno de los grandes problemas: la preparación de los directores
“Uno de los problemas más evidentes en el mundo de la música de banda y en las academias es la falta de preparación de los directores, músicos no preparados para dirigir una formación sin los estudios necesarios para ello. Este problema no es del mismo director, si no de las personas que forman parte del equipo directivo. Hay que dar valor a los estudios y a la preparación de los directores.
Aun así, las bandas de música es un lugar único, puesto que la diversidad de edad y pensamiento se unen bajo el mismo techo con la ilusión de disfrutar todos juntos con la música. “
La música es bella al igual que exigente
“La música es un arte muy bello, al igual que exigente. Hay que ser constantes en el estudio para engrandecer esta disciplina.
Disfrutar con la música, sea cual sea. “
Manoli Aracil
