Francisco Blasco es el nuevo Presidente de la Sociedad Musical “La Artística” de Buñol, al imponerse por 502 votos a su rival, Enrique Piera que ha obtenido 174. Así pues, Blasco sucederá al actual mandatario Guillermo Ayter, durante los próximos años al frente de esta entidad, tras unas elecciones que han sido históricas para la sociedad.
Un total de 1.346 socios y socias estaban llamados a votar y finalmente han acudido a las urnas del Teatro Montecarlo, desde las 12 hasta las 20h, 684 personas. 560 lo han hecho de manera presencial y 126 han votado por correo, aunque después del recuento se han quedado en 124, porque había 2 votos nulos.
Esta votación ha coincidido además con la final del Concurso de Solistas Luis Ayllón, lo que ha propiciado que hubiese un gran ambiente en Montecarlo, sobre todo, durante la mañana.
Entre las líneas generales de Francisco Blasco, están, tal y como adelantó a Hoyunclick.es, “continuar el trabajo comenzado por la Junta Actual y el actual Presidente. La Asociación Buñol-Cullera-Lliria está ya establecida, y ya tenemos las fechas para los Conciertos a 3 Bandas de este año, y el viaje de la Joven Banda de dicha nueva Asociación. Estamos a la espera de la confirmación del intercambio con Portugal e Italia, y que ha costado horas de trabajo, esfuerzo y papel en la secretaría, y que será una experiencia fantástica. Ya se ha concretado el Tercer Curso Internacional de Metales, ya para Octubre ya tenemos visita de la Orquesta Reino de Aragón, y el grupo mexicano de Danza Gineceo, entre otros eventos. Pero todo esto, no son nuevos proyectos a poner en marcha, solo es continuar el trabajo actual“.
En palabras de Francisco Blassco, “los proyectos que quiero poner en marcha tienen tres objetivos principales, que los socios vuelvan a llenar Montecarlo con sus aplausos, que los músicos disfruten la labor que realizan dentro de la sociedad, y que provoquemos bastante curiosidad en niños y padres para que se decidan a probar en la Escuela de Música, incrementando la familia que forma esta Sociedad. Cada proyecto nos impulsa a conseguir uno o varios de estos objetivos. Para ello, el primer paso es estructurar la junta en Areas de trabajo (o Vicepresidencias), que tendrán sus responsables y permitirán mejorar el trabajo invertido en nuestra Sociedad“.
En el área artística, el principal proyecto de Blasco va a ser “planificar el trabajo de todas las agrupaciones para permitir que los músicos y educandos puedan compatibilizar su actividad en la sociedad con el resto de su vida. Es un concepto sencillo que va a ser posiblemente el más difícil a realizar, pero sin embargo, creo que el mas necesario“.
El el área educativa, los principales trabajos según el nuevo Presidente “se centrarán en atraer nuevos músicos, con proyectos como Música en familia. Conservar los que tenemos, facilitando la compatibilidad entre los estudios de grado medio cursados tanto en el conservatorio de Buñol, como en el de Requena, y el trabajo que se realiza en la Sociedad. Más que proyecto, es conseguir de forma definitiva una petición realizada hace ya tiempo, y de la que recogí el testigo ya el pasado Diciembre. Y reunir nuestros profesionales con los jóvenes, mediante una Escuela de perfeccionamiento instrumental“.
En el área de infraestructuras, su principal proyecto, es “la mejora de nuestro teatro Montecarlo. Para mí es especial, ya que decidí entrar en la Junta Directiva después de pasarme un año como técnico de luces y sonido, y tener que aprender de cero muchas cosas sobre luz y sonido, que nunca pensé que tendría que hacer. He colaborado con las diferentes empresas que han realizado eventos en nuestro teatro, y hasta realicé la grabación de la representación de la Bohème, por la ORA. Montecarlo representa el esfuerzo de todos los socios por dar a nuestra Sociedad una joya que muy pocos tienen. Y necesita de muchas reformas que iremos realizando poco a poco“.
En el área de comunicación, Francisco Blasco quiere “comunicar. Que nuestros músicos y socios reciban toda la información en tiempo y forma correcta, como no puede ser de otra forma. Escuchar que quiere el socio (para poder dárselo), y al músico, para saber que nos pide y podérselo dar. Que el resto del mundo sepa el gran trabajo que estamos haciendo. Permitir nuestros músicos, todos ellos embajadores de esta sociedad, nos conecten con el resto del mundo, creando una red de contactos“.
