Ante la incierta viabilidad de los grandes festivales de música a causa de las restricciones acarreadas por la pandemia de coronavirus, la Diputacion Provincial de Huesca (DPH) redobla su apuesta por el Festival de Sonidos de la Naturaleza ‘Sonna’, que se celebrará por segundo año consecutivo en el Alto Aragón desde finales de julio hasta mediados de septiembre.
La fórmula se repite: recitales de aforo reducido, gratuitos y ubicados en parajes oscenses emblemáticos al aire libre.
«El Sonna es una propuesta que surgió en un contexto de pandemia sanitaria y su desarrollo puso de manifiesto que se puede mantener cierto nivel de actividad cultural si se compatibiliza con medidas preventivas que eviten la propagación del virus. Por eso lo reforzamos», explica Francisco Mateo, presidente de la comisión de Cultura de la DPH.
Ayer se dio a conocer el primer nombre de un cartel que se revelará en su integridad en mayo. La violonchelista brasileña Dom La Nena actuará el próximo 7 de agosto en la carrasca milenaria de Lecina en Bárcabo. Con sus imponentes dieciséis metros de altura y siete de diámetro, este prodigio de la naturaleza que ha dado bellotas durante más de 1.000 años, opta en este 2021 a Árbol Europeo del Año y qué mejor que el talento de la intérprete como banda sonora.
Aunque todavía se están negociando algunas contrataciones, el protagonismo de la mayor parte de la programación recaerá en bandas y cantantes aragoneses. Una forma de mostrarles su apoyo en unos momentos tan complicados, sin apenas actuaciones ni giras.
Se realizarán unos 30 conciertos repartidos en las diez comarcas altoaragonesas, con estilos de música diferentes: pop, músicas del mundo, clásica, de autor, tradicional, sonidos de vanguardia… y artes escénicas.
Como novedad, se hará una renovación drástica en las localizaciones elegidas –como máximo repetirían tres o cuatro– con el objetivo de seguir dando a conocer el territorio y reivindicar su diversidad.