Los centros docentes coordinan su programación para que los alumnos puedan compatibilizar ambos estudios ?
Las asignaturas troncales del bachiller se concentran en dos mañanas para ceder tiempo a la música
La incompatibilidad horaria que impedía hasta ahora compaginar los estudios de bachillerato y música entre los dos institutos y el conservatorio profesional toca a su fin en el curso que acaba de empezar en Cullera, una ciudad qe alberga dos de las mejores bandas del mundo. Un acuerdo entre los tres centros docentes va a permitir compaginar los planes de estudios para facilitar el aprendizaje de los estudiantes que combinan ambas disciplinas .
Hasta ahora se acumulaban demasiadas horas libres que no podían ser aprovechadas adecuadamente. Compaginar los estudios convencionales y las clases de música resultaba hasta ahora muy complicado. El colectivo de alumnos afectados por esa dualidad tiene que cursar 17 horas en su instituto, tanto en primero como en segundo de Bachillerato, y después tratar de aprobar las asignaturas de quinto o sexto en el conservatorio.
Estos estudiantes debían seguir un horario en el instituto lleno de vacíos siempre que sus compañeros cursaran asignaturas que ellos no hubieran elegido. Este sistema les hacía perder numerosas horas a lo largo de la semana, según detallan fuentes docentes.
A partir de ahora, los dos institutos concentran en el primer tramo horario de los martes y de los jueves (desde las 8:00 hasta las 10:45) sólo materias troncales obligatorias de los dos cursos de Bachillerato, mientras que el conservatorio aprovecha el resto de los tramos horarios de esos dos días, más las correspondientes tardes para impartir todo su currículum.
«El inconveniente era que había muchas horas libres por la mañana, algunas entremedias de las clases, y esto dificultaba la conciliación del estudio», ha explicado la primera teniente de alcalde y concejala de Educación, Sílvia Roca. Los centros docentes y la conselleria de Educación, con el apoyo del ayuntamiento, han trabajado para dar solución a esta problemática, que además se había convertido en una reivindicación del alumnado. Finalmente se ha conseguido una solución satisfactoria para todas las partes.
Optimizar el calendario
«El nuevo escenario permite a los estudiantes una optimización de su tiempo», destaca Roca, quien resalta el hecho que en un municipio de gran tradición musical como Cullera «esta medida afecta a un número considerable de alumnos, que ahora disponen de un tiempo más organizado para proseguir con sus estudios reglados de Bachillerato y música».
La medida la aplican los institutos Blasco Ibáñez y Llopis Marí en colaboración con el Conservatorio Profesional de Música Mestre Rafael Talens Pelló. El proyecto permite que el alumnado que cursa las dos enseñanzas pueda disponer de una franja horaria más flexible y amplia para poder compatibilizar los estudios de Bachillerato con los estudios profesionales de música. Cullera es una de las localidades pioneras en la Comunitat Valenciana en la aplicación de este sistema.
