Una vez concluida la temporada de abono 2021-22 del Palau de la Música “VLC, València, Ciudad y Música”, con el concierto de la Orquesta de València en homenaje a Teresa Berganza, bajo la dirección de Pablo Heras-Casado y con la mezzosoprano Nancy Fabiola-Herrera, se ha registrado una asistencia total de 20.350 personas.
La presidenta del Palau de la Música, Gloria Tello, ha valorado muy positivamente este hecho, y ha afirmado que “la conjunción entre la Orquesta de València, los solistas nacionales e internacionales, y la apuesta por el gran repertorio y por nuestro patrimonio musical, muchas veces desconocido para el gran público, ha resultado un gran acierto cautivando el interés del público”. En este sentido, el director del Palau, Vicent Ros, ha destacado la labor que está imprimiendo a la Orquesta el director titular Alexander Liebreich, y ha añadido que “nos ha llegado un índice de satisfacción muy importante tras cada concierto, que estamos seguros revalidaremos en la próxima temporada”.
Este registro de asistencia al abono del Palau de la Música, está en consonancia, según Tello “con la tendencia positiva del estudio del Observatorio de la Cultura en 2021, en el que el Palau de la Música recuperó nueve posiciones respecto al año anterior, y donde se comprueba que se ve reflejado el esfuerzo y el trabajo que estamos haciendo, para ofrecer una programación de calidad a la ciudadanía”. Asimismo, la concejala ha anunciado que “en breve anunciaremos la nueva temporada que se iniciará el próximo mes de octubre, que se presenta tan ilusionante como la que acabamos de concluir”.
En esta temporada las abonadas y abonados, y público en general, han podido disfrutar de citas para el recuerdo de tres grandes pianistas, como son el siempre querido y ovacionado Grigori Sokolov, con un titánico recital romántico alemán de Beethoven, Brahms y Schumann; de Javier Perianes con el programa “El amor y la muerte” y de Boris Giltburg con obras de Rajmáninov y Liszt.
La Orquesta de València ha recibido también excelentes críticas musicales. Con Alexander Liebreich se interpretó un gran segundo concierto de piano de Brahms con Elisabeth Leonsjaka, y un extraordinario Haydn que tocó el artista en residencia de este año, el violonchelista Pablo Ferrández. Como también volvió Pinchas Zukerman y sorprendieron otro gigante del violonchelo como es el noruego Truls Mørk interpretando a Dvorák, o el oboísta francés François Leleux con Richard Strauss. La violinista Viviane Hagner maravilló con su versión de Alban Berg, y se volvió a ofrecer ópera en versión concierto tras muchos años, con el primer acto de “La Valquíria” de Wagner, y un magnífico elenco, encabezado por la mejor soprano wagneriana del momento como es Anja Kampe.
Como también la OV recibió la visita de uno de los más reputados directores, lleno de magisterio, como es Leonard Slatking, la del compositor valenciano Francisco Coll que estrenó “Lilith”; la de Karel Marc Chichon con la pianista Marta Menezes, y los debuts muy aplaudidos de Nuno Coelho en su concierto con el pianista Jan Lisiecki; François López-Ferrer con el viola Joaquín Riquelme, titular en la Filarmónica de Berlín, o los de las directoras Shiyeon Sung con la violinista Akiko Suwanai y de la japonesa Nodoka Okisawa con Midori, que llenaron las salas. Ramón Tebar dirigió a los grandes pianistas Sergei Babayan y Marc-André Hamelin, y otro concierto que captó la atención fue el dirigido por Manuel Hernández-Silva con el trompeta Pacho Flores. Además, destacó la presencia de la compositora internacional Elena Mendoza, Premio Nacional de Música.
